28 julio 2004

Baños de Pueblo

   Ah, el ocio.... ah, la inactividad total... ahh, el marasmo de los músculos atrofiados por la más absoluta pereza.
    Y seis días después consultar el blog y ver que todo sigue igual. Qué letal hueva me invade.
   En fin, en 24 horas regreso a la capital, a mi solitario, abandonado y apocalípticamente sucio departamento, donde una tranquilidad chicha y una conexión decente por cable me permitirán volver a postear como me gusta: diario.
   El viaje a Huatabampo (tierra que me vio crecer) ha sido casi todo lo que esperaba: mucha calma, mucho campo, rica y pacífica playa desierta, buena comida patrocinada por mi santa jefecita (que antier huyó de la ciudad) y por supuesto, estar con ellos 2, la primera mi complemento, el segundo (o segunda) mi prolongación.
   Ah, por cierto, noticias de último minuto y traídas a pecata por el paréntesis anterior: El pasado viernes estuve en lo del ginecólogo que atiende el babygate y ahora salió con que mi brevemente nato heredero será una niña. Hace un mes era niño, como algunos de uds. saben. Así que el proyecto cuna azulmarinaconpatitos se aborta temporalmente hasta que encuentre un ginecólogo congruente o mi primogénito se decida a una sesión del más puro exhibicionismo.
    Había olvidado lo horrorosa que es la música de los cyber cafés atendidos por adolescentes. Cuando el prepúber en cuestión es hombre es casi seguro que esté escuchando o un rock muy poco llevadero (lo que consiste en linkin´park, rammstein, the offspring o cualquier otro grupo que no esté de moda desde el 99) o bien, una selección cordon bleu de todo lo gruperín del noroeste del estado (no nombraré grupos, sé que irían corriendo a bajar sus canciones). Si, por el contrario, el criadero de acné es del género sweet, entonces podrás deleitar tus bellos oídos con estrellas consagradas y dignas merecedoras de un grammy y un tiro en la cabeza, como la nueva diosa de los pedófilos cibernautas: Belinda, el extraído de un grupo que ya de por sí era para suicidarse: Kalimba (chequen la métrica de los nombres Ka-lim-ba Be-lin-da, debe ser algo diabólico y subliminal). Creo que con las menciones anteriores ya les quedará claro el porqué me largo en este mismo momento. Me tocó mujer y en este momento estoy tarareando "no me quiero enamorar" ...alguien déme un hacha.

1 comentario:

Semidios dijo...

no se me estrese carnal.. usted tranquilo