04 junio 2008

Ohh Bama (léase con la melodía de Oh, Dana, de Ritchie Valens)

Este tipo, en 24
Este señor, en Deep Impact

Y ahora, por fin, en la vida real, el sueño más húmedo de Jesse Jackson, el clímax de Martin Luther King Jr. y la materialización de la fantasía más lúbrica de Spike Lee.

La nota completa en Democracy Now.

Barack Obama, por quien la verdad hace unos meses nadie daba un penny, mostró que Bill Clinton no es el único hombre que puede burlarse de Hillary Clinton (ah si, este blog ya permite comentarios políticamente incorrectos) y se llevó las precontiendas electorales por el partido demócrata, quedando ya de frente, solito y con la nariz afroamericana olisqueando las alfombras de la sala oval de la casa blanca (¿la irán a pintar? estaría chingón un Pimp My Crib).

A mi, por supuesto, me importa dos berenjenas si el próximo presidente de los E.U.A. es negro. Es más, de hecho qué machín si gana Obama, y no porque me guste como candidato, ni porque confíe en sus capacidades, visión, programa. No. Que gane, única y exclusivamente para poder ir a Tenessee, Missouri, Nueva Orleans y demás estados que hubieran dado lo que sea porque la esclavitud siguiera siendo una costumbre legaloide y verle la cara a los ancianos anquilosados que conservan los galones y uniformes de sus padres y abuelos en naftalina y ven las grandes pinturas de los plantíos de algodón cosechados con sudor y sangre y bastardos café con leche, pensando "ah, those where the times".

Dicen por ahí que McCain es casi casi un Reagan remasterizado, o un Bush con poco menos dinero. Las dos cosas me repelen. Además, si Obama decide arreglar sus problemas al estilo west side, sería chingón ver llegar a un chingo de soldados a Irak en descapotables Lo Rider pintados de colores estrambóticos y armados con bates, cadenas y pistolas custom, dejando claro quién es el dude of the hood.


¿Mi propuesta para la Secretaría de la Defensa? ¡Obviamente!

1 comentario:

Anónimo dijo...

jajajajajaja, apruebo la mosion